La Virgen de Guadalupe, figura central en la fe de millones de personas, ha sido asociada con innumerables milagros a lo largo de los siglos. Desde curaciones sorprendentes hasta eventos que desafían la lógica, su intervención es venerada por sus fieles.
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¿Cuál es el origen de la Virgen de Guadalupe?
El culto a la Virgen de Guadalupe tiene su origen en las supuestas apariciones de la Virgen María a San Juan Diego Cuauhtlatoatzin en diciembre de 1531, en el cerro del Tepeyac, actual Ciudad de México. Según el relato, la Virgen pidió que se construyera un templo en ese lugar. Para probar la autenticidad de su mensaje, dejó su imagen impresa en el ayate de Juan Diego después de que este llevara flores como señal al obispo Fray Juan de Zumárraga. Este hecho marcó el inicio de una devoción que se ha expandido por todo el mundo.
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¿Cuáles son los milagros más famosos de la Virgen de Guadalupe?
Uno de los primeros milagros atribuidos a la Virgen de Guadalupe fue la curación de Juan Bernardino, tío de Juan Diego, quien estaba gravemente enfermo durante las apariciones. Además, se destaca el milagro de las rosas fuera de temporada, que confirmaron la autenticidad del mensaje mariano.
Otros hechos extraordinarios incluyen la erradicación de epidemias como la peste de “tabardillo” en 1695 y la fiebre tifoidea en 1736. En 1921, un atentado con bomba en la Basílica de Guadalupe dejó intacta su imagen, un evento que los fieles consideran milagroso.
También se cuentan historias como la calma de un caballo desbocado en el siglo XVI y el salvamento de marineros durante un naufragio en 1751. Cada uno de estos relatos refuerza la creencia en el poder de su intercesión.
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¿Cómo fue la explosión en la Basílica de la Virgen de Guadalupe?
En 1921, un hombre introdujo un ramo de flores con una bomba oculta al altar mayor de la Basílica de Guadalupe. La explosión dañó seriamente el área circundante, pero la imagen de la Virgen, protegida por un vidrio ordinario, permaneció intacta. Incluso objetos cercanos, como un crucifijo de metal, fueron deformados por la fuerza del estallido. Este evento, ampliamente documentado, es uno de los milagros más emblemáticos atribuidos a la Virgen.
Los relatos sobre los milagros de la Virgen de Guadalupe refuerzan su lugar en el corazón de los creyentes, quienes acuden a ella en busca de consuelo y protección. Su legado sigue vivo, atrayendo peregrinos de todas partes del mundo.
